Sommers, conocido por adaptar personajes clásicos a la pantalla grande, principalmente los monstruos clásicos de Universal (Momia, Drácula, Van Helsing, Frankenstein, Hombre Lobo), retoma un proyecto que había sido ofrecido originalmente a Guillermo del Toro.
Tarzan el Hombre Mono, es un personaje creado por Edgar Rice Burroughs y apareció por primera vez en la novela “Tarzan of the Apes”, en 1912. Desde entonces, el personaje, cuyo nombre significa “Piel Blanca”, y su mitología, han sido llevados al cine en al menos 88 ocasiones, convirtiéndolo en una de las más populares sagas cinematográficas.
En la historia original, Tarzan/John Clayton, adoptado por Kala, conoce a Jane Porter a los 20 años, después de que ella y su padre sufren un percance en el mismo sitio donde encallaran los padres de Tarzan. Cuando ella regresa a Estados Unidos, Tarzan va en pos de ella. En novelas posteriores, Tarzan tiene un hijo, y eventualmente regresa a la jungla con Jane, asqueado de la hipocresía y superficialidad de la “civilización”.
La serie cinematográfica más popular comenzó en 1932 con “Tarzan The Ape Man”, con Johnny Weismuller y Maureen O’Sullivan. Weismuller, campeón olímpico de natación, ha sido el Tarzan más duradero con 12 filmes, y el que dotó al personaje de un heroísmo y una nobleza tan primitiva como ingenua, lo que lo convertía en un imán para el público en general.
1999 marcó un nuevo inicio para la saga, con la película animada de Kevin Lima y producida por los estudios Disney. Esta historia, que mostró técnicas de animación por computadora como no se habían visto hasta el momento, se basa tanto en el original de Burroughs como en la versión de “Greystoke”, (1984) retomando a los gorilas como la familia de Tarzan y convirtiendo a Clayton, primo y rival suyo en la novela, en el villano siniestro propio de Disney. Hasta la fecha, esta ha sido la última película del hombre mono estrenada en cines.
No quiero insistir en esto, pero suena a Tarzan Begins.
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